Llega febrero y la celebración de
San Valentín está a la vuelta de la esquina. Como ya os comenté en mi post del año pasado con motivo de esta festividad,
me encuentro entre los detractores de los festejos del 14 de febrero, pero eso
no implica que os traslade mis reticencias hacia esta efeméride ni que la
ignore.
Soy consciente de que muchos de
vosotros abrazáis con ilusión las ceremonias en torno a la figura de Cupido y
por ello San Valentín se ha hecho un hueco en nuestros artículos de este mes.
Pero no un San Valentín cualquiera, sino un Día de los Enamorados al estilo almagra32. Una celebración en la que
los efectos se evidencian en los gestos y no en los bienes materiales,
alejada de los influjos comerciales y en la que mandan la imaginación, la originalidad
y el consumo responsable.
Por ello, la sección "hazlo
tú mismo" de este mes está dedicada a los detalles que podéis preparar
vosotros mismos para sorprender a vuestras parejas el próximo 14 de febrero.
Fuente: HungryHappenings / bloghogar / uncomo / HungryHappenings |
Nuestra primera propuesta es que en
lugar de acudir a la pastelería a comprar la impersonal caja de bombones habitual, os
metáis en la cocina y pongáis en práctica vuestras dotes reposteras. Podéis
elegir entre una tarta de queso con forma de corazón
(la receta de la imagen es en inglés, pero podéis adaptar otra receta de tarta
de queso. Los únicos elementos imprescindibles son el molde de corazón y el
colorante alimenticio). Unas galletas de mantequilla y mermelada
de fresa modeladas con el símbolo universal del amor. Unos caramelos de dulce de leche de colores con mensajes divertidos; o
los siempre socorridos (y fáciles de hacer) bombones de chocolate, por
supuesto también con el diseño de corazón. Son recetas aptas para principiantes,
que no requieren mucho tiempo en la cocina y que seguro dibujarán una sonrisa en
vuestras parejas.
Fuente: decoraymas / realsimple / etsy / camillestyles |
Si la cocina no es lo vuestro o
si queréis rizar el rizo y multiplicar por dos las muestras de amor, también os
proponemos la tradicional tarjeta de San Valentín. Eso sí, nada de ir a la
papelería o a los grandes almacenes. Coged papel, lápiz, pegamento, tijeras y
todos los materiales de DIY que necesitéis
para preparar una tarjeta única y exclusiva. El rojo, los corazones, los cantos
al amor y a un sentimiento de posesión tolerable son algunos de los clásicos
omnipresentes en estas misivas. Así que poned a trabajar vuestra imaginación y
destrezas manuales para crear una propuesta original. No obstante, si el tiempo juega
en vuestra contra o vuestra habilidad con las tijeras está al nivel de un
alumno de preescolar, siempre os podéis inspirar en los modelos que aquí os
dejamos o descargaros una tarjeta como ésta.
¡Arriba el amor!
mrg
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